Dependencia emocional y cacas mentales
En realidad el tema central de todo esto son las relaciones abusivas y codependientes. No es una crítica, no; más bien es decir "te entiendo y te apoyo". Una sobá de lomo colectiva; pero no voy a hablar desde el punto de vista de la persona que me habló del tema, sino del mío, que es el que mejor conozco.
Tal vez se pregunten qué me da la autoridad para hablar de un tema así, y la respuesta es más sencilla de lo que creen: tuve una relación codependiente y abusiva. Fue hace algunos años atrás (6-7 más o menos), y por suerte logré salir de esa relación; pero no todos tienen la suerte que yo tuve.
En ese tiempo era más joven y weona. Sinceramente no cachaba de qué se trataba todo el asunto, pero sí sabía que este sujeto (llamémoslo X), me atraía. Mucho. El problema es que no era sólo a mí, sino también a otro chilión de chiquillas; y él se aprovechaba de eso.
Después de mucho arrastrarme y sufrir por X, logré lo que quería: que me tomara en cuenta como su "one and only", y como saben, la realidad supera a la ficción y él no era el "salvador" ni el "héroe" que yo creía. La realidad distaba mucho de esa fantasía en mi mente, pero uno en la pubertad no cacha la volá y se deja llevar; al menos yo lo hice, y no podía ver más allá de esa pantalla. Por ese tiempo, no vi que la persona que tenía en frente no se parecía nada a lo que yo creía.
El tiempo pasaba y la relación con X se hacía cada vez más y más tormentosa. Yo, falta total de amor propio, buscaba sentirme bien conmigo misma por medio de él, y además intentaba suplir su propia falta de autoestima. Doble pega. Una paja. Finalmente yo dependía de su estabilidad emocional para estar "bien", y él no era emocionalmente estable; y él dependía de mi para encontrar aprobación de su persona y sentirse querido por alguien. Finalmente se volvió una persona abusiva: absorbente, un poco cruel, celópata y egoísta.
Hasta que un día le dije que dejara de achacarme sus problemas, y me despachó con una falta de elegancia que nunca olvidaré. Ese fue el "final". A la semana siguiente tenía a otra chica en sus brazos, y por lo que supe tiempo después, repitió la misma historia una y otra vez. Whatever.
Hablé con él por última vez hace dos años, y para no-sorpresa mía, no había cambiado en nada. Seguía siendo el mismo, pero yo no, y noté que, sin estar resentida, me desagradó de muchas maneras distintas y entendí por qué nunca hubiese funcionado. Ese sí fue el final; pero como no todo es blanco/negro en la vida, esa relación me sirvió para aprender muchas cosas, y es mi arma secreta cuando no se me ocurre nada creativo; salvo esta vez, porque la situación lo amerita.
También me siento en la obligación de decir, de la forma más honesta posible, que él no es mala persona. Para nada. Sólo no encaja en mi vida; y por mucho que haya pasado, tener resentimientos no vale la pena.
Amigas y amigos, a lo que quiero llegar es a esto:
La felicidad, la aceptación y el autoestima que estás buscando no está en otras personas. Está en ti. Cito a la wonderful Amy Poehler: "La gente no es medicina". No es tu deber hacer sentir bien a tu pareja y recordarle lo valioso que es cada minuto de tu vida, puedes hacerlo porque te nace y porque lo amas con todo tu corazón; pero no tienes por qué sentirte en la obligación de hacerlo; y al mismo tiempo, no es deber de tu pareja (o amigos incluso) hacerte sentir bien. Es sólo responsabilidad tuya.
Depender emocionalmente del resto es una caca aguada. En serio. Da lata que muchos nos peguemos la cachá después de mucho tiempo y muchas cagás, pero es necesario y enriquecedor a largo plazo.
Si quieren pasarla mal por alguien, nadie se los impide; pero ojalá en la soledad de sus piezas se planteen, seriamente, por qué elegir sufrir. Si llegan a la conclusión que "mejor sentirse mal a no sentir nada", por favor, vuelvan a pensarlo. Mil veces si es necesario, pero piénsenlo.
Por otro lado, es vital aprender a estar solo sin volverte loco, porque la soledad permite muchas cosas y, básicamente, es un privilegio. Sabiendo estar solo y en paz, da paso a relaciones honestas. Estás con la gente porque quieres, no porque le tienes miedo a la soledad (esta parte quedó media extraña porque no supe cómo decirlo).
Eso. Valoren su individualidad, su bakanosidad y lo lindohermosoprecioso de cada uno, y jamás, JAMÁS, bajen sus estándares por otras personas. No importa quién sea. Siempre a ti mismo se fiel; y shao.
Tal vez se pregunten qué me da la autoridad para hablar de un tema así, y la respuesta es más sencilla de lo que creen: tuve una relación codependiente y abusiva. Fue hace algunos años atrás (6-7 más o menos), y por suerte logré salir de esa relación; pero no todos tienen la suerte que yo tuve.
En ese tiempo era más joven y weona. Sinceramente no cachaba de qué se trataba todo el asunto, pero sí sabía que este sujeto (llamémoslo X), me atraía. Mucho. El problema es que no era sólo a mí, sino también a otro chilión de chiquillas; y él se aprovechaba de eso.
Después de mucho arrastrarme y sufrir por X, logré lo que quería: que me tomara en cuenta como su "one and only", y como saben, la realidad supera a la ficción y él no era el "salvador" ni el "héroe" que yo creía. La realidad distaba mucho de esa fantasía en mi mente, pero uno en la pubertad no cacha la volá y se deja llevar; al menos yo lo hice, y no podía ver más allá de esa pantalla. Por ese tiempo, no vi que la persona que tenía en frente no se parecía nada a lo que yo creía.
El tiempo pasaba y la relación con X se hacía cada vez más y más tormentosa. Yo, falta total de amor propio, buscaba sentirme bien conmigo misma por medio de él, y además intentaba suplir su propia falta de autoestima. Doble pega. Una paja. Finalmente yo dependía de su estabilidad emocional para estar "bien", y él no era emocionalmente estable; y él dependía de mi para encontrar aprobación de su persona y sentirse querido por alguien. Finalmente se volvió una persona abusiva: absorbente, un poco cruel, celópata y egoísta.
Hasta que un día le dije que dejara de achacarme sus problemas, y me despachó con una falta de elegancia que nunca olvidaré. Ese fue el "final". A la semana siguiente tenía a otra chica en sus brazos, y por lo que supe tiempo después, repitió la misma historia una y otra vez. Whatever.
Hablé con él por última vez hace dos años, y para no-sorpresa mía, no había cambiado en nada. Seguía siendo el mismo, pero yo no, y noté que, sin estar resentida, me desagradó de muchas maneras distintas y entendí por qué nunca hubiese funcionado. Ese sí fue el final; pero como no todo es blanco/negro en la vida, esa relación me sirvió para aprender muchas cosas, y es mi arma secreta cuando no se me ocurre nada creativo; salvo esta vez, porque la situación lo amerita.
También me siento en la obligación de decir, de la forma más honesta posible, que él no es mala persona. Para nada. Sólo no encaja en mi vida; y por mucho que haya pasado, tener resentimientos no vale la pena.
(Holly Golightly es un ejemplo perfecto de relaciones disfuncionales)
Amigas y amigos, a lo que quiero llegar es a esto:
La felicidad, la aceptación y el autoestima que estás buscando no está en otras personas. Está en ti. Cito a la wonderful Amy Poehler: "La gente no es medicina". No es tu deber hacer sentir bien a tu pareja y recordarle lo valioso que es cada minuto de tu vida, puedes hacerlo porque te nace y porque lo amas con todo tu corazón; pero no tienes por qué sentirte en la obligación de hacerlo; y al mismo tiempo, no es deber de tu pareja (o amigos incluso) hacerte sentir bien. Es sólo responsabilidad tuya.
Depender emocionalmente del resto es una caca aguada. En serio. Da lata que muchos nos peguemos la cachá después de mucho tiempo y muchas cagás, pero es necesario y enriquecedor a largo plazo.
Si quieren pasarla mal por alguien, nadie se los impide; pero ojalá en la soledad de sus piezas se planteen, seriamente, por qué elegir sufrir. Si llegan a la conclusión que "mejor sentirse mal a no sentir nada", por favor, vuelvan a pensarlo. Mil veces si es necesario, pero piénsenlo.
Por otro lado, es vital aprender a estar solo sin volverte loco, porque la soledad permite muchas cosas y, básicamente, es un privilegio. Sabiendo estar solo y en paz, da paso a relaciones honestas. Estás con la gente porque quieres, no porque le tienes miedo a la soledad (esta parte quedó media extraña porque no supe cómo decirlo).
Eso. Valoren su individualidad, su bakanosidad y lo lindohermosoprecioso de cada uno, y jamás, JAMÁS, bajen sus estándares por otras personas. No importa quién sea. Siempre a ti mismo se fiel; y shao.
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Llevo mucho rato pensando si subir esta entrada o no. Admito que me da mucho pudor exponer algo tan personal en internets, pero tengo una deuda, y hay que cumplir.
A la persona que me dio la idea: muchas gracias por depositar tu confianza en mí, y sé que lo que puse puede que te sea imposible de procesar ahora, pero en un tiempo más lo entenderás. Espero. Mucho éxito y amors para ti, y no temas dejar atrás las cosas que te hacen mal. Un beso.
Y para todo el resto, muchiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimas gracias por todo el apoyo, comentarios y aguante que me han dado en este proyecto. No puedo expresar suficiente lo agradecida que estoy con cada uno <3.
Recuerden visitar mi facebook para estar al día! Un beso y muchos pingüinitos de amor!
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